Peligro de Aceleramiento

Justificados pues por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo: Por el cual también tenemos entrada por la fe á esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. Y no sólo esto, mas aun nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia. Romanos 5:1-3

Tener Fe es habitar en una paciencia legitima de dominio propio. Que cosas pueden perturbar nuestra alma y sacarnos el tiempo de espera en el Señor? Veamos con la ayuda del Señor alguna de ellas: El emitir respuestas con demasiado protagonismo, basado en nuestro interés propio es una de ellas. Cuando nos salimos del sonido de Dios, y lo mudamos rápidamente por nuestras experiencias personales y realidad temporal.

El estar demasiado apurados por hacer la obra encomendada, el vivir nuestros días en continuo apuro desespero por obtener cosas materiales, mientras que el Señor nos llama conquistar el alma cada día y alinearla a la voz de Dios, siendo saciados de forma continua de toda Su plenitud, salirnos del vacío temporal de quehaceres, cuando Dios dice Espera, guarda silencio, tengo un mejor plan para ti, totalmente diferente a tus anhelos personales, conquista tu alma con Mi Espíritu descansa en Mis bondades.

No se turbe vuestro corazón ni tenga miedo Juan 14:27 b

Jesús enseñó a sus discípulos de la turbación en este pasaje tan precioso, ellos tenían todas las posibilidades de a pesar de haber estado viviendo con Jesús que volvieran a turbarse en las dificultades venideras, en el orden jurídico turbar es inquietarse, perturbación del orden o el derecho. Violenta emoción que altera el semblante e impide o entorpece el habla. Estar turbado es el estar ciego, desconcertante, inquietante, conmovedor, emotivo, sugestivo, estremecedor. Cada día podemos salirnos rápidamente del lugar jurídico que el Señor nos asignó voluntaria e involuntaria por situaciones que vienen a ejercitarnos en la sustancia de Verdad que fuimos llamados.

Por esta razón también, obrando con toda diligencia, añadid a vuestra fe, virtud, y a la virtud, conocimiento;2 Pedro 1:5

Andar en el Espíritu no es una experiencia mística, que sólo logran algunos, el andar en el espíritu es desligar tu alma de todo aquello que pueda llevar a una cautividad temporal, que comienza a ser costumbre en tus hábitos, de tal forma que te encuentres atrapado, por esa conducta creyendo cómo normal, pero Gracias a Dios por el Espíritu Santo que escudriña nuestros corazones, y nos hace ejercitar en esas virtudes tan preciosas. El esperar en Dios es una de ellas, el esperar a otro, el ser compasivos. Cuándo en ocasiones nos ponemos en una situación de juicio con los demás aunque sea insignificante, también nos desalojamos de la paz que nos otorga el Señor, para ser turbados por nuestras propias concupiscencia.

Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno.2 Pedro 1:5

Estamos expuestos continuamente a improntas, situaciones comprometidas, difíciles, peligrosas, pero ese es el momento de no abandonar los pensamientos en Cristo, es no cambiar nuestra Cabeza, Cristo en nosotros, la esperanza de Gloria. Es dar el orden continuo a nuestro ADN, nuestra esencia , el conocer que somos sus hijos, Su hechura, real sacerdocio, nación santa, que no se desliga rápidamente de las necesidades de otros, pues somos guiados en Su inteligencia, para lo que fuera necesario , que habita sus días con la cordura santa, comportándonos cómo cuerpo de Cristo, portaos varonilmente y esforzaos, esta expresión del apóstol Pablo, que nos recuerda no olvides quien eres. 1 Corintios 16:13 Ejercitándonos en Amor.

En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos. Efesios 4:22

Estamos expuestos de forma permanente a desajustar nuestra Cabeza. Que podamos vivir nuestros días, sin los voltios de aceleramiento del alma que nos desactualizan de la realidad y verdad de Dios, Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad. Escudriñando nuestro corazón delante del Señor, corrigiendo lo acelerado de nuestra alma, que en ocasiones nos hacen caer en trampas de vanidades ilusorias. Espere en el Señor, esté dispuesto a oír lo genuino, que Él le instruirá para dar pasos seguros en Su Voluntad. Aleluya!